sábado, 23 de marzo de 2013

Duatlón particular


Pues sí, yo creo que hemos inventado otra modalidad de duatlón. En lugar de carrera, bici, carrera nosotros hacemos otras transiciones: bicicleta, parar a buscar espárragos y bicicleta.

Como últimamente estoy parada (pero no quieta) tengo toda la mañana "libre" sin niños para hacer un poco de todo. Normalmente Javier propone y yo, como no tengo especial predilección, pues suelo estar de acuerdo con las proposiciones, por eso, cuando este jueves vimos que no iba a llover y que la mañana prometía, cogimos la bicicletas y decidimos ir a buscar espárragos.

Pasamos la finca de Las Agrupadas y allí medio escondimos la bicicleta en un ribazo (con la precaución de atarlas juntas, claro, que si viene alguno listo con un todoterreno y se las echa al maletero, nos hace una faena). El sitio estaba plagado de esparragueras pero o bien todavía no han salido todos o alguien se nos adelantó. Estuvimo andando y buscando hasta la una y pico así que no pudimos entrenernos mucho más pues Lucía salía del cole a las dos. Cogimos un manojillo que, junto con unos cuantos huevos, almendras y otros tantos ingredientes, nos hizo un moje sabrosísimo de esos que tanto gustan a mi marido, que encantó a los niños y donde mojamos casi una barra entera de pan (poca cosecha para tanta caminata pero ¿y lo bien que lo pasamos?)

Me parece que no va a ser la última vez que hagamos esta actividad porque aúna todo lo que nos gusta: se hace deporte, es económico, ecológico y además, con un poco de suerte, te llevas a casa este sabroso manjar con sabor a campo (es más fácil comprarlos en Mercadona pero no están tan ricos y tienes que pagarlos). 






viernes, 8 de marzo de 2013

Si él dice que se puede ...

... SE PUEDE. Esta mañana he acompañado a Javier en su entrenamiento diario y, como yo no puedo seguir su ritmo corriendo, lo he hecho en bicicleta. Hemos salido sobre las diez desde la puerta de la piscina para ir a ver cómo iba el río después de estos días de lluvia. Ya imaginábamos que pudiera ser que el río se hubiera desbordado un poco y hubiese invadido el camino y, así ha sido.

He pensado que daríamos la vuelta pero Javier me ha pedido la bicicleta, ha cruzado el camino, lo ha vuelto a descruzar y ha dicho "vamos, no es para tanto". "Sube", y me he subido: él pedaleando de pie y yo, sentadita en el sillín hemos cruzado el camino sin mojarnos ni un poco. Nos ha llovido, nos ha hecho aire pero, hemos terminado lo que habíamos propuesto. Ni que decir tiene que hemos disfrutado de lo lindo. Aquí van unas imágenes (la calidad no es muy buena pero mi móvil de botones no da para más).






domingo, 3 de marzo de 2013

Carrera urbana Ciudad Real 2013

Hoy sí que se ha pasado el tiempo en un suspiro; puesto que me tocaba asistir de interventora no he podido seguir a los corredores como suelo hacer ya que tenía que estar plenamente centrada en otros menesteres. Así que, ni fotos, ni ánimos, ni "ná de ná", no se puede estar en misa y repicando.

Al llegar a Ciudad Real he perdido a Javier de vista y no lo he vuelto a ver hasta el kilómetro 5 y de refilón. Ya me había comentado hacía varios días que iba a salir a rodarla pero un compañero de entreno me dijo que desde cuándo Javier no salía en las carreras a competir. Claro, yo pensé que esto era cierto (a partir de ya, pienso hacer más caso a mi marido) y hoy no me lo esperaba en una posición más atrasada de lo normal. Aún así, creo que lo ha hecho muy bien en cuarenta minutos y casi sin despeinarse, vamos que no hay más que ver la cara con la que ha entrado hoy a meta para comprobar que no miento.

En cualquier caso, sé que muchos de nuestros visitantes buscan fotos y precisamente eso no va a faltar pues entre las poquitas que he hecho yo y las del fotógrafo familiar que nos hemos buscado tenemos un buen montón. ¡Aquí van!